viernes, 4 de septiembre de 2015

A los predicadores de prosperidad: Salven a sus seguidores del suicidio

A los predicadores de prosperidad: Salven a sus seguidores del suicidio.......
 por; John Piper 4/13/2015

El apóstol Pablo advirtió contra el deseo de ser rico. Y por implicación, advirtió contra los predicadores que estimulan el deseo de ser rico en vez de ayudar a la gente a deshacerse de ello. Él advirtió: Pero los que quieren enriquecerse caen en tentación y lazo y en muchos deseos necios y dañosos que hunden a los hombres en la ruina y en la perdición.

Porque la raíz de todos los males es el amor al dinero, por el cual, codiciándolo algunos, se extraviaron de la fe y se torturaron con muchos dolores (1 Ti. 6:9-10). 

 Éstas son palabras muy graves, pero no encuentran su eco en la predicación del evangelio de prosperidad. No es malo que los pobres quieran ciertas medidas de prosperidad para que puedan tener lo que necesitan y puedan ser generosos y dedicar tiempo y energía a tareas que exaltan a Cristo además de las que sirven para el sustento diario. No es malo buscar a Cristo para ayuda en esta búsqueda. A Él le importan nuestras necesidades (Mt. 6:33). Pero todos —pobres y ricos— estamos en el peligro constante de poner nuestro afecto (1 Jn. 2:15-16) y nuestra esperanza (1 Ti. 6:17) en las riquezas en lugar de Cristo. Este “deseo de ser rico” es tan fuerte y tan suicida que Pablo usa el lenguaje más fuerte para advertirnos. Mi súplica es que los predicadores de prosperidad hagan lo mismo.

Nota del editor: Este es el segundo artículo en una serie de 12 súplicas a los predicadores de la prosperidad. Los artículos fueron publicados originalmente en el libro de John Piper, ¡Alégrense las naciones! 
Publicado originalmente en Desiring God. 

 ​John Piper (@JohnPiper) es fundador y maestro de desiringGod.org y ministro del Colegio y Seminario Belén. Durante 33 años, trabajó como pastor de la Iglesia Bautista Belén en Minneapolis, Minnesota. Es autor de más de 50 libros.